A menudo infravaloramos la importancia de mantener una buena salud en nuestros pies o de llevar un calzado adecuado. Pero la verdad es que nuestros pies necesitan atención, sobre todo porque una mala pisada tiene efectos en todo nuestro cuerpo. La manera en la que pisamos, en la que distribuimos el peso de todo nuestro cuerpo, puede tener efectos catastróficos para articulaciones, rodillas, espalda…

Por suerte hay muchos ejercicios para cuidar y fortalecer tus pies en casa, que son sencillísimos y que solo tendrías que hacer tres días a la semana. Igual que estiramos antes de hacer ejercicio, nuestros pies pueden necesitar un calentamiento para resistir mejor la semana.

¿Por qué es importante fortalecer tus pies?

Aunque tendemos a pensar en las partes de nuestro cuerpo de forma separada, la verdad es que cualquier dolencia o mal hábito, si se mantiene en el tiempo, puede ir afectando a todo lo demás. Ese es el caso de los pies. Andamos todos los días, y la salud de nuestra pisada define cómo distribuimos el peso de todo nuestro cuerpo. Cuando nuestros pies están cansados porque les damos demasiada caña o cuando están flojos porque llevamos una vida sedentaria, inconscientemente cambiamos nuestra forma de caminar, lo cual puede hacer daño al resto del cuerpo.

Hacer algunos ejercicios para cuidar y fortalecer tus pies pueden evitar daños mayores. Si caminas mucho o haces mucho deporte, estirar y ejercitar tus pies te vendrá muy bien. Si por trabajo u otras razones pasas demasiado tiempo sentado o de pie, estos ejercicios también te pueden venir muy bien. Con una sencilla rutina de ejercicios conseguirás:

• Reducir o evitar dolor en pies y tobillos.
• Mejorar la flexibilidad y el rendimiento deportivo.
• Reducir dolor muscular y mejorar la circulación.
• Prevenir lesiones y patologías como la fascitis plantar o el Neuroma de Morton.
• Mejorar la pisada para evitar daños en cadera, rodillas o columna.

7 ejercicios para cuidar y fortalecer tus pies en casa

Para ayudarte, puedes seguir el ejemplo visual de este vídeo.

1. Separar los dedos

Siéntate, coloca los pies sobre el suelo y trata de separar los dedos entre ellos. Mantén la separación unos segundos y repite diez veces. Al principio notarás más control en un pie que en otro, pero es totalmente normal.

2. Levantar, apuntar y rizar

Planta los pies en el suelo, luego levanta los dedos y la planta del pie hasta que solo el talón toque el suelo. Entonces haz lo contrario, hasta que solo las puntas de los dedos toquen. En esta posición, recoge los dedos hacia dentro, de manera que “los nudillos” de los dedos toquen el suelo. Hazlo diez veces.

3. Agarrar la toalla

Deja una toalla en el suelo, coloca el pie encima y arruga los dedos del pie, para tirar la toalla hacia ti. Cinco veces con cada pie.

4. Rueda una pelota de tenis con la planta del pie

Rueda con cada pie dos minutos ejerciendo un poco de presión. Si no tienes pelota de tenis puedes utilizar cualquier otra pelota pequeña o una botella.

5. Recoger elementos

Coloca canicas o tornillos grandes en el suelo y trata de cogerlos con la parte inferior de los dedos. Repite 10 veces con cada pie.

6. Estira el dedo gordo del pie con la mano

Coloca el pie sobre la pierna y usa la mano para estirar el dedo gordo hacia la parte superior del pie. Mantén unos segundos y hazlo diez veces con cada pie.

7. Estirar los dedos del pie con la mano

Lo mismo que el anterior, pero agarrando todos los dedos del pie hasta que sientas un pequeño estiramiento en el interior del pie. Aguanta unos segundos y repite 10 veces con cada pie.

Si aún siguiendo estos ejercicios para cuidar y fortalecer tus pies, notas molestias, es posible que necesites comprar un calzado más adecuado para ti. En Celia Ruiz contamos con los mejores profesionales para aconsejarte y con calzado ortopédico especializado para cuidar todo tipo de patologías del pie. Si tienes molestias constantes, no dudes en acudir a un podólogo cuanto antes y sigue sus recomendaciones.